... cuenta la leyenda, los rojos de otoños conquistan el cielo, buscando primaveras, escuchando el eco de su voz, voz de un corazón agitado, tras cruzar un profundo océano,
!Oh! noche de frío invierno, !Oh! noche oscura del alma, !Oh! tempestad que perturbas mi mente, !Oh! mar inquieto que desasosiego creas, siendo tu mi tormenta, la creadora de mi sufrimiento, la que desvela mi sueño.
Navegando sin rumbo hacia un nuevo amanecer, buscando nuevos horizontes, ... nuevas primaveras,
!Oh! vil tormenta, rama de enredadera en mis pensamientos soñados, que agitan mi mente, !Oh! gran lamento, que desazón genera, ... navego y navego en un mar sin fondo, lleno de dudas y lágrimas saladas.
Navegando sin rumbo, ... luchando contra viento y marea. Siendo mi brújula sostente de mis emociones enturbiadas, siendo alimento de confusión y tormento, sin poder hacer nada por evitar que así fuera.
!Oh! océano que te abres, tras las puertas de un mar de lágrimas saladas, navegando en un agitado océano, con las velas hinchadas por el viento de una tormenta que inunda y que oprime mi alma, lágrimas saladas que ensalzan mi mente, mente inquieta y desordenada.
!Oh! océano agitado, dame tranquilidad, !Oh! Dios mío tu que eres amor y compasión, apiádate de mi, !Oh! Dio mío, no me abandones, ... ven y sálvame, calma el temporal y dame claridad.
Cruzando la tormenta, mi barco en un acantilado quedo postrado, dirigido por las olas que el viento riza, conducido por la brújula del eco de mi mente humana, mente empañada por la agitación de un profundo océano lleno de ramas enredadas, mente que no dejaba escuchar el eco de mi voz, voz no verdadera, voz inventada y creada por el miedo y el temor, voz que desvela el más incierto de los ecos de la mente humana, voz que no dejaba resonar el eco de mi mente divina.
!Oh! Ángel de la Guarda, ven y sálvame, exclamé;
Ayúdame, ... señálame el camino, ven y sálvame, haz que cesé la tormenta.
Desolada y sin fuerzas, vencida por la tormenta, caí rendida, rogando y suplicando, a Dios que me ayudará.
Ven y sálvame, no me abandones Gran Creador, Creador del cielo y de la Tierra, apiádate de mí, Tú, sólo Tú, Gran Creador, Tú, sólo Tú, que nos haces ser sólo uno con el todo, no me abandones, Tú mi Señor.
En mitad de la tormenta, despertada por el deseo de encontrar un nuevo amanecer, mis lágrimas saladas curaban las heridas de mi alma, al cesar mi llanto, se escuchaba el eco.
-Ven levántate, ... libérate del fardo del pasado y construye el jardín de tu futuro, escucha el eco de tu voz, que no es otra que la que fluye del corazón de tu Yo divino, de ese Dios que llevas dentro, deja que fluya, no dudes, no temas, ven acércate.
Fue entonces cuando alce mi mirada al viento y vi un hermoso rayo de Luz inmenso, luz que fue trazando la estructura de mis futuras alas, alas para volar, ... volar para traspasar el puente, ... puente que pude ver con claridad, claridad que transportaba la calma al cesar la más horrible tempestad, puente rodeado de lindas flores, flores blancas y doradas, rodeado de hermosos ángeles alados, bailando con sus bellas arpas.
Uno de ellos se postro ante mi, diciéndome;
-Ven, ... observa este hermoso paraíso, míralo es un regalo divino, siente la Paz, siente el amor, siente la Plenitud, purifica tu alma, este paraíso que te ofrece Dios, no es más que el eco de tu voz, tu eres Amor y Compasión.
Cogí su mano, traspasando el umbral,
¿Quién eres? ... pregunté;
-Soy yo tu Ángel de la Guarda
¿Qué quieres? ¿Qué haces aquí?
-He venido a decirte que Dios está esperando que vuelvas a poner tu mirada en Él,
-Tienes que cumplir tu misión, será entonces cuando cese la tormenta, será entonces cuando encuentres nuevas primaveras, será entonces cuando transcienda la noche oscura del alma.
-No se puede luchar contra tu verdad, escucha el eco de tu voz, la voz de tu interior.
¿ Cuál es mi Misión? pregunté;
-Eso es algo que no seré yo quién lo desvele amada mía,
-Ese será el más grande de tus secretos.
-Sólo ve, ... atraviesa el umbral,
- Él sólo Él, hará resonar el eco de tu corazón.
-Abandónate y sólo ve, siente sus alas rozar tu piel, alcanzarás esa "Paz" tan deseada por ti, siéntela y alcanzarás la "Plenitud", Amada mía, sólo ve, Fluye, libérate, suéltate, alcanzarás el paraíso, no existe cielo, no existe infierno, todo es producto de tu mente humana, abandónate y abraza tu mente divina.
Dale la bienvenida a tu Yo Divino, fluye y el guiará tus pasos, pondrá dulzura en tus palabras, amor y compasión en cada uno de tus actos., tu Yo, será el que hará el camino, una camino sin ramas enredadas.
-¿Ahora que Sientes?, preguntó;
Siento la suave caricia del rozar de sus alas, mis dedos rozan el cielo, cielo que abre las puertas del paraíso eterno, siento el fluir de mi sentir, siento el amor más puro, el amor más bello, siento amor y compasión ... encontré mi Paz, ahora escucho el silencio, ahora siento el eco de mi voz.
-Señalé tu camino, como tu me rogaste, contestó;
-Ahora ya no hay pasado, ni futuro labrado, sólo un presente hermoso,
-Ahora no habrá confusión alguna, no habrá más tormento, una vez traspasado el umbral
-Ahora transformaste tu sueño, en Ti sólo cabe "Amor y Compasión", ... escucha el silencio del Eco de tu Voz.
-Sólo decirte que Él nunca te abandono, fuiste Tú, sólo Tú, la que enredaste las ramas al desviarte del camino, camino que empaño tu verdadero destino.
-Ahora amada mía, sólo tienes que caminar en este hermoso paraíso eterno, con tu mente serena, contemplar el paisaje de un nuevo amanecer y una hermosa primavera.
"Alcanza tu paraíso, ... no esperes más"
Con todo mi cariño, un beso lleno de Luz y de Amor
Bonitas palabras, salen de tu alma. Es precioso te felicito mi hermana alma,te quiero.
ResponderEliminarGracias por existir, bendigo la hora que Dios te puso en mi camino, mi querida hermana del alma. Te quiero cada día más.
EliminarPrecioso mi ángel...te quiero
ResponderEliminarGracias de corazón a corazón, un beso lleno de luz y de amor, te quiero
Eliminar